Concierto Soli Deo Gloria: la música como una experiencia religiosa
En el contexto de la celebración de Corpus Christi, el jueves 19 de junio se realizó en la Parroquia de la Veracruz el concierto de adoración Soli Deo Gloria, una iniciativa organizada por la Pastoral UC que convocó a la comunidad en un espacio de fe, emotividad y música.
A pesar de ser una noche fría e invernal de junio, la Parroquia de la Veracruz en Lastarria se llenó de calidez y recogimiento a través de música sacra contemporánea que enciende el alma y ayuda a contemplar la presencia viva de Cristo.

Organizado por la Pastoral UC, el concierto de adoración Soli Deo Gloria 2025 reunió a los compositores nacionales Erwin Ojeda, Pelayo Puga y Juan Guillermo Negrete, además de las interpretaciones del Coro Alumni UC, bajo la dirección de Karin Friedli, y del Ensamble Vocal Taktus, dirigido por Javiera Lara Salvador.
El objetivo de Soli Deo Gloria consiste en promover la creación de obras musicales religiosas para facilitar el encuentro más profundo con Dios y se realiza con motivo de la fiesta católica del Corpus Christi, la solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo en la que se celebra Su presencia real en la Eucaristía.

Entre los asistentes al concierto se encontraba el Vice Gran Canciller UC, Pbro. Osvaldo Fernández de Castro; la directora de la Pastoral UC, Ángela Parra; el Obispo auxiliar de Santiago, Pbro. Álvaro Chordi; y el rector de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Juan Carlos de la Llera.
“Conmemorar hoy Corpus Christi en esta Iglesia de la Veracruz nos interpela de un modo muy especial. Esta iglesia, que por décadas fue un ícono arquitectónico y espiritual en el corazón de Santiago, hoy nos recuerda que incluso en medio de las ruinas puede florecer la esperanza, que donde hubo dolor puede renacer el encuentro, que la comunidad cuando se une en torno a lo esencial es capaz de sanar, de celebrar y de alzar la mirada”, reconoció el rector UC Juan Carlos de la Llera.
El obispo auxiliar de Santiago y quien presidió la adoración, Pbro. Álvaro Chordi, manifestó que el patrimonio sagrado se debe devolver y abrir a la comunidad. “Conectamos la Eucaristía con la vida, y eso mismo también hace esta Parroquia de la Veracruz, que abre sus puertas a todos los habitantes de la ciudad y conecta esta Eucaristía hacia todos los que transitan por estas calles”, destacó.

Lauda Sion Salvatorem
Esta secuencia litúrgica católica, que significa “Alaba, Sión, al Salvador”, es el nombre de las dos obras de estreno absoluto en el concierto. Una de ellas fue compuesta por Pelayo Puga, compositor y estudiante de clavecín en la Pontificia Universidad Católica de Chile; y la otra por Erwin Ojeda, profesor de Artes con Mención en Música por la Universidad de Los Lagos y seleccionado tres años consecutivos como compositor en Soli Deo Gloria.
Pelayo Puga explicó que esta obra, a través de la modernización de estilos antiguos, busca hacer honor a cómo Cristo renueva la Sagrada Escritura y que “más allá de la ofrenda de la música en sí, el texto expresa alabanza y regocijo ante la resurrección de Cristo y su influencia sobre el espíritu humano”, comentó.
Por su parte, Erwin Ojeda, desde Puerto Montt, expresó que “Soli Deo abre la instancia de mostrar la calidad musical en su máxima expresión, genera una ventana a la composición coral de excelencia para Dios, para nosotros y para la trascendencia”.

Como reestreno, Juan Guillermo Negrete, presentó Deus misereatur nostri. El compositor, formado en Chile y Roma, exhibió esta obra para coro mixto que dialoga entre lo antiguo y lo nuevo, inspirada en el motete renacentista y la música romántica. “Fue muy lindo ver que había mucha gente rezando de rodillas frente al Santísimo. Una muy bella oportunidad para poder apreciar el arte, especialmente este arte que es tan sublime como es la música”, observó el compositor.
Música y fe en Chile
“La música sacra ha estado desde las pequeñas capillas hasta las grandes basílicas y catedrales, desde voz y guitarra, hasta coros y ensambles. La fe y la música van de la mano, la música es nuestra forma de conectar y dar vida a la fe, cantando, escuchando y generando una emotividad personal y profunda”, sostuvo Erwin Ojeda.

Si bien ha visto cierto abandono de la música sacra en su empleo litúrgico, Pelayo Puga cree que como “música absoluta va bien encaminada” y tiene buena proyección. Y enfatizó que “lo que llamamos ‘música’ es en otras culturas parte integral e indivisa del ritual y lo sacro. Veo en la creación y realización de música sacra la posibilidad de volver a estas formas de alabanza más primordiales. No por nada muchos conciertos son descritos como experiencias religiosas”.
Revive el Soli Deo Gloria 2025 y experimenta esta adoración a Cristo a través de la música en este enlace: https://www.youtube.com/live/WFc6A9es4sk
