Alrededor de 40 personas se reunieron en la Sala Audiencia de rectoría en un almuerzo donde se recordaron los 15 años del Premio Espíritu UC, que desde el año 2003 destaca anualmente al alumno de pre grado que a lo largo de su etapa universitaria haya estado abierto a las distintas dimensiones de lo humano, consciente de su responsabilidad personal y social, destacándose por su compromiso con la comunidad universitaria y el país.
El almuerzo estuvo encabezado por el rector, Ignacio Sánchez, quien agradeció al ex rector Pedro Pablo Rosso haber dado inicio a este premio, y destacó que “todos los años revisamos estas postulaciones y nos maravillamos de la cantidad de actividades diversas complementarias que realizan los estudiantes y las estudiantes que son presentados ante la comisión”.
Los estudiantes que a la fecha han ganado el premio, actualmente son ex alumnos de las carreras de ingeniería civil, periodismo, medicina, derecho, enfermería, y química y farmacia, entre otras. Rosario Aguayo, profesora de la UC, señaló que le tocó armar un colegio de cero, donde estuvo dos años, hoy en día trabaja en otro y busca “ver cómo seguir aportando en la educación, que es un campo muy bonito donde hay mucho que hacer”, dijo. En esta oportunidad los ganadores del premio recibieron como reconocimiento la exhortación apostólica “Gaudete et Exsultate” y las encíclicas “Fides et Ratio” y “Laudato Sí´”, editadas por la UC.
Además de los 11 ganadores del premio, en la ocasión estuvieron presentes el rector UC, el Vice Gran Canciller, miembros del comité directivo, el capellán general UC, el Ombdusman, el director y la directora ejecutiva de la Pastoral y decanos.
Durante la instancia se escuchó a los premiados, quienes contaron sobre cómo han seguido dando testimonio en las diferentes circunstancias en la que se encuentran. Gladys Sepúlveda, química farmaceutica, señaló que “hace 5 años sigo como jefa de un proyecto social, de la fundación Juan Pablo II, donde hacemos estimulación cognitiva en un hogar de ancianos que está en Ñuñoa”.
El proceso de postulación al Premio Espíritu UC se realiza cada año a través de la Pastoral, que convoca a las facultades a postular a sus alumnos destacados (quienes deben estar cursando el pre grado). Los secretarios académicos de las escuelas se hacen cargo de encontrar a los candidatos, quienes son ratificados por el consejo de la facultad. Luego, las postulaciones son evaluadas por un jurado compuesto por el rector o su representante, el vice gran canciller, el director de la Dirección de Pastoral y Cultura Cristiana, el presidente de la FEUC y el representante de los alumnos ante el Honorable Consejo Superior. La premiación se realiza durante la ceremonia de Inauguración del Año Académico de la UC.