Una misa en el salón de honor de Casa Central, celebrada por el vice gran canciller, padre Tomás Scherz, dio inicio a la ceremonia de conmemoración de la visita del Papa Francisco a Chile y nuestra casa de estudios. En su homilía, hablando del hombre leproso que se acercó a Jesús para que lo sanara, llamó a dejar que el diálogo del amor sea el que nos purifica: “Jesús conmovido extendió la mano y lo tocó sin ninguna explicación, solo dijo ‘lo quiero, quedas purificado’. Querer es amar. En seguida la lepra desapareció y quedó purificado. Nosotros, tal vez, pondríamos como esencial la purificación, sin embargo, Jesús quiso resaltar el encuentro salvador que se da solamente cuando uno confiere el amor. No solo con la palabra, sino con el gesto salvador: porque te quiero quedas purificado”.
Agradeciendo la visita del Santo Padre, el vice gran canciller UC, proclamó que lo esencial de Jesús es proferir el amor, núcleo central del pueblo cristiano: “este espacio de hoy día en que hemos usufructuado con tantos hermanos de distintas universidades, podemos decir que ese diálogo es posible también para nuestra convivencia nacional. Nuestra tarea es que acudan a él para tener sed de lo más hermoso: la verdad, la belleza, la bondad, el amor proferido. El único Salvador”.
Al término de la misa se proyectó un documental realizado por la Facultad de Comunicaciones, el cual registró todo el proceso previo, in situ y posterior de la visita del Papa. Cómo la universidad se preparó durante meses para producir tal evento, con entrevistas a los responsables de toda la producción y una mención especial a la dirección y apoyo musical del hoy fallecido Víctor Alarcón.
Para finalizar la ceremonia el rector, Ignacio Sánchez, quien acompañó al Papa Francisco desde que se bajó del auto en la Alameda frente a la fachada de la universidad, recordó algunas de sus reflexiones y gestos: “La capacidad de avanzar en comunidad está desafiada a no quedarse aislada de conocer, así como tampoco de construir conocimiento. La UC es el verdadero laboratorio para el futuro del país”. El rector aprovechó de anunciar el deseo de que el paso de Francisco por la Universidad Católica, se quede como una obra y un legado “por eso, hemos instaurado una cátedra de Sustentabilidad en su honor”. Y quiso recalcar la sencillez del Santo Padre, revelando: “Al entrar al salón Fresno y sentir la explosión de aplausos, me dijo textual: ‘che, tenés a todo Chile en la universidad’, ese es el Papa. A los pocos segundos, uno se siente con mucha confianza a su lado.
Los asistentes al evento tuvieron la oportunidad de mirar y aprender más sobre los regalos que Francisco entregó a la UC: un libro con mapas del año 1.600 y medallas con las imágenes de San Alberto Hurtado y Santa Teresa de los Andes. Además de los obsequios entregados por la universidad al Papa: el libro “Textos escogidos de antropología cristiana” de Pedro Morandé; la medalla de la Universidad Católica por sus 130 años de creación; una pequeña maqueta en madera que representa al proyecto UC, Capilla País; cuadernos de oración y un documento de compromiso con la paz; y “Lienzo Vivo”, creado por Luis Larrondo, profesor de la facultad de Ciencias Biológicas, el cual reproduce la imagen del Santo Sudario, a partir de la reacción de un hongo expuesto a la luz, representando la integración de la ciencia, el arte y la fe.
Adicionalmente estuvieron a disposición de los asistentes las tareas que realizaron tanto la universidad como la Pastoral UC en preparación para la visita papal. Tales como publicaciones, festivales y misas, entre otras.