En medio de la pandemia por el coronavirus, Siembra UC se contactó y fue al encuentro de las personas y localidades visitadas en años anteriores para vivir una Semana Santa unidos en comunidad y en la oración.
“Quisimos hacer algo diferente como proyecto. Pese a que estamos viviendo una situación compleja a nivel mundial, no queríamos que estos días pasaran como unos más en la cuarentena, sino que queríamos darle un enfoque misionero y en salida, que responde a lo que el Papa y la Iglesia nos piden”, manifestó la jefa general de Siembra UC, Elisa Granese.
Y es que para preparar y vivir esta Semana Santa diferente, este proyecto, que trabaja con voluntarios escolares y universitarios, se organizó para salir al encuentro de las comunidades visitadas en años anteriores de las diócesis de San Felipe, Chillán, Los Ángeles y Santiago.
Es una idea que surgió teniendo en cuenta la necesidad de acompañar a las personas, sobre todo en estos días de aislamiento por la pandemia. “Estuvimos con la gente a través de la oración, de la formación, con talleres, con una conversación para saber cómo estaban y que ellos supieran que pese a la distancia física, nosotros estábamos con ellos”, sostuvo Elisa Granese.
En este sentido, en una de las comunidades acompañadas, después de que unos voluntarios se juntaran virtualmente con una señora, al día siguiente el hijo de ella les mandó un WhatsApp a uno de los misioneros de Siembra para agradecerle por haberse contactado con la mujer y darle compañía, contención y esperanza en esta cuarentena.
En la iniciativa participaron más de 200 personas y se sumaron 23 localidades, que fueron visitadas anteriormente en el invierno de 2019 y el verano de 2020. “Se generó un ambiente muy especial y positivo, donde hubo mucha gente, voluntarios y jefes de zona, actuales y pasados, que se pudieron contactar con las comunidades, logrando, a través de talleres y oración, que estuviéramos muy unidos pese a no estarlo físicamente”, destacó la jefa de Siembra.
Asimismo, agregó, se pudo palpar el otro enfoque que tiene Siembra UC, que es la formación interna de los misioneros. “A la vez que íbamos al encuentro de las personas, logramos formar a los mismos voluntarios, que era algo que ellos de alguna manera también buscaban para vivir una Semana Santa distinta”.
Siembra UC es una iniciativa que nace en 2003, tras la inquietud de un grupo de jóvenes de integrar las voluntades de escolares y universitarios para trabajar juntos por Chile y su Iglesia. De esa manera, se organizan para sacar adelante las misiones de invierno y verano, que cada año convocan a más de 500 alumnos de III° y IV° Medio, para parte de sus vacaciones al servicio de Dios y el prójimo.